La gripe afecta sobre todo a garganta y bronquios inicialmente. El tiempo desde la entrada del virus en la persona y el inicio de los primeros síntomas de la gripe suele variar de 1 a 5 días. El comienzo de los síntomas suele ser brusco, con fiebre, que puede llegar a ser alta, malestar general, síntomas respiratorios (tos, congestión nasal), dolor de cabeza, dolores articulares y musculares y, a veces, síntomas digestivos (vómitos, diarrea).
Ante estos síntomas, debe acudir a su médico si:
- No desaparece la fiebre pese al tratamiento.
- Presenta dificultad para respirar.
- Tiene tos persistente pasados 10 días.
La infección suele durar una semana, aunque en ocasiones puede complicarse y pasar a ser grave.
Es importante realizar un uso adecuado y responsable de los servicios sanitarios para evitar su saturación y garantizar una asistencia adecuada. Se debe hacer uso de las urgencias solo en los casos de gravedad.