Es innecesario evitar el contacto con inmunodeprimidos tras recibir la vacuna frente a la varicela.
Únicamente y por precaución, si aparecieran lesiones vesiculosas en el lugar de la inoculación, circunstancia muy poco frecuente, se deberá evitar el contacto directo de estas lesiones con personas inmunodeprimidas y embarazadas.